El realizador brasileño Eduardo Coutinho, guionista de la famosa película Doña Flor y sus dos maridos, fue asesinado el domingo en su residencia en Río de Janeiro a los 80 años. La Policía señaló que el principal sospechoso es el hijo del director, quien fue arrestado la jornada de ayer.
Los primeros informes en la televisión local señalan que el hijo del realizador, Daniel, quien sufre una enfermedad mental, apuñaló a su padre hasta la muerte.
La esposa del cineasta, Maria das Dores Coutinho, de 62 años, resultó gravemente herida por puñaladas en el pecho y el hígado y se encuentra hospitalizada, indicó la Policía.
Tras la muerte de su padre, Daniel Coutinho llegó hasta la casa de un vecino "diciendo frases incomprensibles” en una aparente crisis de esquizofrenia, indicó Rivaldo Barbosa, responsable de la investigación, citado por el sitio G1 de Globo.
Además de su colaboración en el clásico de 1967 Doña Flor y sus dos maridos, el realizador es también autor de ABC do Amor, que dirigió con el argentino Rodolfo Kuhn.
Nacido en Sao Paulo, Eduardo Coutinho es considerado uno de los más finos realizadores brasileños, y sus allegados se manifestaron impresionados por la noticia de su muerte violenta.
El director Caca Diegues, que conocía a Coutinho desde hacía 50 años, dijo que eran "amigos cercanos”, al tiempo que lo calificó como "uno de los realizadores más inteligentes” que jamás conoció y "el mejor guionista de documentales de todo Brasil”.
El realizador Silvio Tendler también se mostró devastado por la muerte de Coutinho. "Sus filmes y sus lecciones sobre la vida permanecerán en la memoria. Además de su calidad como guionista de documentales, era un excelente guionista de cine, como se ve por ejemplo en Doña Flor y sus dos maridos”, dijo. "Era uno de los más grandes directores que Brasil jamás tuvo. Su muerte es una gran pérdida”, acotó.
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